Origen etimológico de la palabra Quiromasaje
El término «quiromasaje» procede de la unión de la palabra griega «quiros», que significa «manos», y de «masaje», cuyo origen es confuso, pues puede tener diversas procedencias posibles, como por ejemplo, de la voz griega «massien», que significa «amasar o frotar» o del término sánscrito «makeh», que significa «apretar con suavidad». Por tanto, literalmente «quiromasaje» significaría «masaje con las manos».
Definición de Quiromasmaje
Si nos vamos a la definición de la Real Academia Española (RAE), nos encontramos una explicación un poco más específica de lo que es el «quiromasaje», pues lo definen como 1. m. Masaje terapéutico dado con las manos. De este modo, podríamos concretar que el «quiromasaje» es una técnica manual, en la que se emplean únicamente las manos para amasar, presionar o frotar, con la intensidad adecuada, determinadas regiones del cuerpo con el fin de relajar y aliviar molestias. De este modo, se diferenciaría de los masajes que emplean aparatos eléctricos o instrumentos mecánicos.
La palabra Quiromasaje en España
La palabra «quiromasaje» fue empleada por primera vez en España, en la década de los años 40, por el Dr. Vicente Lino Ferrándiz, que estudió naturopatía en Estados Unidos y Suecia. Allí se formó en el «masaje tradicional europeo», también denominado «masaje sueco», desarrollado por el sueco P. Henrik Ling. Ling, viajó a China y allí descubrió diferentes técnicas de masaje que importó a su regreso y a partir de las cuales desarrolló el ‘sistema Ling del movimiento’, que combinaba ejercicio, masaje y sauna. En definitiva, el «quiromasaje» es una modalidad del «masaje sueco», un tipo de masaje fuerte y vigoroso.
Conclusión
El «quiromasaje» es una técnica que aporta grandes beneficios a quien lo recibe, ya que, la sola fricción de las manos sobre el cuerpo genera reacciones muy positivas, como el aumento moderado de la temperatura de la piel, el equilibrio del estado anímico, la estimulación de la circulación sanguínea,…
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